Wednesday, July 31, 2013

Valencia y un poco de Madrid





















Aranjuez

Estoy convencida de que el tiempo vuela aquí en Madrid. Tenemos la misma rutina: nos despertamos, nos reunimos en el comedor para desayunar, vamos al edificio de filología en la Compultense para asistir a nuestras clases, volvemos a la residencia, almorzamos en el comedor alrededor de las 2:30 de la tarde, descansamos y descubrimos la ciudad. Aunque creo que ya conozco muchas partes de Madrid bien dado que he visitado muchos de los sitios turísticos, necesitaría muchísimo más tiempo aquí si quisiera conocerla como nativa. Esta beca me dio una oportunidad fantástica e inolvidable para estudiar y conocer esta ciudad y otras partes de España. Ojalá pudiera quedarme aquí un tiempo más, pero echo de menos a mi familia. Además, aunque siempre me pongo un poco triste cuando viene el fin del verano, me hace ilusión conocer a mis nuevos estudiantes y empezar el año escolar.

Hace casi dos semanas que subí la última entrada y mucho me ha pasado. El miércoles pasado fui con algunos amigos a Aranjuez, un pueblo precioso ubicado cerca de Madrid. Tomamos el tren y llegamos en menos de una hora, todos listos para explorar este sitio nuevo y ver el palacio. Hacía mucho sol y nos sentimos muy aliviados cuando por fin entramos en el palacio y escapamos del calor. Desafortunadamente no estaba permitido sacar fotos al dentro del palacio (¡como es normal en todos los museos¡) así que saqué muchas fotos de los jardines lindísimos y la fachada del palacio. A pesar de que Aranjuez es un pueblo chiquito cuando se compara con una ciudad urbana como Madrid, mis amigos y yo nos lo pasamos muy bien en Aranjuez. Para mí era un escape del ruido que siempre está presente en las ciudades grandes. Paseamos tranquilamente sin prisa y tomamos algo de comer en algunos sitios diferentes. Primero fuimos a 100 Mondatitos donde pedimos muchos bocadillos pequeños y baratos. Todo costaba un euro: ¡qué ganga! Después de salir de 100 Montaditos nos apetecía gelato así que tuvimos que disfrutar de nuestro postre favorito del verano: helado Me encantó sentarme al aire libre charlando con unos buenos amigos sin tener que vigilar el reloj. Era un día muy agradable y nos lo pasamos muy bien en Aranjuez. Voy a dejarlos con este enlace que destaca una composición famosa mundialmente llamada el Concierto de Aranjuez









Tuesday, July 23, 2013

Barcelona

El fin de semana pasado tuve el placer de visitar a una buena amiga, Johanna, que había acabado de mudarse desde Santiago de Compostela, donde la conocí hace tres años, a Barcelona. Ella ya me había dicho  que me iba a encantar todo de Barcelona y tenía razón: era una experiencia inolvidable. Vimos todo lo posible dentro de las 48 horas que estuve allí y tengo ganas de volver a conocer la ciudad mejor. Ahora les enseño cuánto hice en 48 horas por este serie de fotos. 

El vuelo original se había cancelado y tuve que esperar en el aeropuerto tres horas antes de coger otro vuelo a Barcelona. Me senté a tomar una merienda y leer para entretenerme antes de que despegara.

Hay columnas que imitan los colores del arco iris que empieza en un lado y van hasta el otro. Es un aeropuerto muy estético. 

Encontré alguna tienda que tenía muebles y cosas para la casa. Estaba encantada de todo (especialmente me gustó este sillón), pero no los precios jaja.

Por fin llegué a Barcelona casi a la medianoche. Fran y Johanna vinieron a recogerme al aeropuerto y me enseñaron algunos sitios por la noche. La foto no salió muy bien, pero quería incluir algo de mi primera noche allá.


Esta es la vista desde el piso de Johanna. Me encantan las puertas azules y las plantas puestas alrededor de los balcones.

Fue el dicho del mes del calendario de Johanna. 

Estoy fuera de la plaza de toros. Ahora no se usa porque Barcelona ha sido una ciudad antitaurina por muchos años. La otra plaza de toros se ha convertido en un centro comercial. 

Aquí estoy fuera del mercado. Adentro hay un poco de todo, como se puede ver en las fotos siguientes. 




No es sorprendente que empezamos el día con café. Johanna y yo somos aficionadas del café y paramos para disfrutar del café después de la comida y cena también. 

Al otro lado Fran, el amigo de Johanna, empezó el día con Dunkin Donuts. El lema no se traduce igual en España.

Después del desayuno fuimos al parque de Gaudí. Me gusta que todos sus obras hayan sido instaladas, o es decir que no están metidos en algún museo. Fue muy brillante y mucho de su arte refleja la naturaleza.




Gaudí usó fragmentos de vidrio para crear arte nuevo y aquí está una de las únicas (si no la única) figura completa (una mariposa).

Wow. La Sagrada Familia. Todavía no se ha completado, pero ya lo sé que algún día volveré para verla  completada. Que impresionante como es ahora y que impresionante será cuando esté completada.

Otros edificios de Gaudí.
Tuve que sacar una foto de unas de mis marcas favoritas: Pronovias. Casi me compré el vestido de boda aquí (fue mi segunda opción) pero al fin y cabo compré otro. Todavía me quedo encantada con la belleza de Pronovias.
Almorzamos en un restaurante vietnamita donde se servía comida muy buena y saludable.

Johanna y yo el el parque de Gaudí.

Una foto preciosa de un barrio en Barcelona.

Entramos en otro café por la tarde y tomamos más café. ¿Se nota un patrón en cuanto al café?


Buenos amigos.

Pude capturar una foto de una bandera de independencia de Cataluña colgando del balcón. Había muchas por todas partes.

Delante del palacio.

Delante del estadio olímpico. Barcelona era ciudad anfitriona de los juegos olímpicos de '92.

El domingo decidimos ir a las montañas para hacer senderismo. 

Después de casi cuatro kilometros subiendo....

¡Habíamos llegado!
Yo, agotada después del maratón de subir.

Lo de bajar era tan difícil como lo de subir. Tal vez fuera por estar muy cansada ¡jaja!

Pude capturar muy buenas vistas. 

Por fin llegamos al punto de partida de nuevo.